CARTAGENA/ Las comparsas ganadoras ponen fin a la fiesta en Cartagena

Grupos de bailarines y chirigotas se despiden hasta el año que viene con un ameno pasacalles, la Quema de Don Carnal y fuegos artificiales
PEDRO CONESA/ La Verdad

Los cartageneros despidieron anoche la fiesta de Carnaval con un último desfile y la entrega de premios. Más de veinte grupos ganadores de los concursos de danza, comparsas y chirigotas volvieron a mostrar los plumajes, la purpurina y los sensuales movimientos de cadera por las calles del centro de la ciudad.

En comparación con el gran desfile del sábado había más relajación pero las mismas ganas que hace unos días a los centenares de personas que se echaron a la calle para disfrutar del cortejo. El rigor del sábado dio paso a uno más animado y más corto en el que el medio millar de participantes, la mayoría mujeres, tardaron un poco más de una hora en desfilar.

A las ocho de la tarde, los integrantes de las comparsas, grupos de bailes y chirigotas se concentraron en la plaza de los Héroes de Cavite. El desfile comenzó por la calle Mayor, con el asombro de algunos espectadores que pensaban que el carnaval ya había acabado. «¿El final no fue el sábado?», preguntó María Jiménez, a su marido, Andrés García, mientras su hija Elena miraba asombrada las piruetas de los bailarines.

Coches con altavoces

Acompañados de varios coches cargados de grandes altavoces, el cortejo resultó muy vistoso y rápido. En poco más de una hora los participantes llegaron al pabellón del instituto Jiménez de la Espada, donde fueron entregados los premios.

Para la presidenta del Carnaval, Carmen Sánchez, ha sido una de la mejores ediciones de los últimos años, sobre todo por la participación del público que ha acudido a todos los actos de la fiesta. «El domingo fue un éxito.

La paella gigante y las fiestas infantiles tuvieron buena acogida. La gente ha participado y todo ha salido bien. El desfile es un reconocimiento a su esfuerzo», afirmó, Carmen Sánchez. A medianoche fue la Quema de Don Carnal y posteriormente un castillo de fuegos artificiales puso fin al carnaval más intenso y participativo de los últimos años.