Vecinos y hosteleros de La Manga reclaman una mayor oferta cultural y de ocio en otoño e invierno

Diario el Faro

Muchos hosteleros y empresarios de la zona, a causa de la escasa afluencia turística, se ven obligados a cerrar sus establecimientos durante casi seis meses por la imposibilidad de hacer frente a los gastos
La Manga del Mar Menor, zona de veraneo elegida por miles de españoles y extranjeros para fijar su residencia estival y pasar las vacaciones, presenta un aspecto casi fantasmal con la llegada del frío y las primeras lluvias
Muchos comercios y restaurantes se ven obligados a cerrar ante la falta de clientes y las consecuentes dificultades económicas.

La mayoría de los vecinos que se resisten a abandonar sus domicilios “a pesar del bajón del invierno”, manifiestan la “profunda tristeza de ver la zona tan desierta y tan abandonada” en cuanto a servicios fundamentales se refiere. En este sentido, Elena Aristi, propietaria de una vivienda en la zona, comentó que “es lamentable que durante el invierno las personas que viven aquí sólo dispongan de un par de establecimientos abiertos para salir y comprar”. Tanto a nivel sanitario como de transportes la zona presenta muchas deficiencias una vez acabado el verano. Así, agregó que “no es normal que en una localidad donde hay un colegio con más de 300 niños y un Instituto no se disponga de un servicio de rayos en el Centro de Salud”.

Asimismo, otra propietaria, Conchi Zaldívar, afirmó que “a principios de octubre comienzan a cerrar algunos hoteles por la falta de clientes”, pero que este cierre generalizado “se acentúa de forma especial en el mes de diciembre”, cuando la zona se queda completamente vacía. Esta falta de usuarios supone el cierre de numerosos establecimientos y restaurantes durante un periodo cercano, en muchos casos, a los seis meses.

Carla Tamashova, encargada de un restaurante en la Plaza Bohemia, comentó que cada vez son menos las personas que residen en la zona durante el invierno, y que en su gran mayoría las que continúan “son matrimonios de la tercera edad y extranjeros”.

El presidente de la Asociación de vecinos, Jose Manuel Echevarría, constató que la única solución para evitar la despoblación de La Manga en invierno es que se ofrezca a los visitantes y residentes una alternativa cultural y de ocio a la existente oferta de sol y playa, ya que “incluso en agosto cada vez viene menos gente”, porque “los turistas reclaman mayor actividad y mejor gestión de los servicios”.

Así, Echevarría comentó que los grandes perjudicados son los empresarios y trabajadores de la zona, ya que “muchos autónomos tienen que darse de baja porque no pueden permitirse seguir pagando las cuotas sin trabajo”. En este sentido, afirmó que “durante el invierno la zona se transforma y dejan de prestarse servicios que para los que aún quedan viviendo son imprescindibles”., por lo que pide una mayor atención al Ayuntamiento para evitar esta situación.

‘Las playas son para el verano’

Muchos hosteleros de la costa del Mar Menor y de La Manga se ven obligados a cerrar sus establecimientos una vez finalizada la temporada de verano, ya que la escasa afluencia de turistas y los pocos vecinos que mantienen su lugar de domicilio en la zona durante el periodo invernal hacen que sea imposible para muchos de los propietarios mantener los negocios y hacer frente a los gastos.

Los vecinos reclaman una mayor oferta cultural que atraiga al turismo

Los vecinos de La Manga reclaman a los Ayuntamientos de Cartagena y San Javier que tengan más en cuenta la zona a la hora de celebrar eventos culturales y de ocio, ya que en este sentido, “actualmente es la gran olvidada”, según comentó el presidente de la asociación de vecinos, José Manuel Echevarría. Así, confirmó que una oferta paralela a la de sol y playa atraería al turismo durante todo el año, y así los hosteleros y empresarios no tendrían que ceñir su calendario laboral a los meses de verano. Asimismo, los vecinos reclaman servicios complementarios, como la mejora en los transportes urbanos y la creación de un carril bici para toda la zona de la costa.

Opiniones:

Carla Tamashova: “Desde hace unos años se nota más el descenso del turismo, que es más acusado en los meses de invierno, aunque por el momento para las zonas más turísticas de la costa el efecto no es muy preocupante”.

Boubker Bouchentouf: “Los hoteles a finales de este mes o principios de diciembre cierran todos, y actualmente es la única oferta que atrae al turismo, por lo que habría que promocionar la zona a través del fomento de actividades culturales”.

Elena Aristi: “Durante el verano La Manga está muy bien, pero cuando llega el invierno dejan de prestarse algunos servicios, lo que da una mala imagen a los pocos turistas que vienen durante la temporada estival”.

Conchi Zaldívar: “Para los pocos que vivimos aquí o venimos durante el invierno es muy triste ver como no quedan más que un par de establecimientos abiertos. Esto se generaliza más aún cuando en diciembre cierran los hoteles”.