Los ecologistas piden precio por 3 hectáreas de suelo público para frenar el deterioro del espacio protegido23.04.08 -
JOSÉ ALBERTO GONZÁLEZ/La Verdad
La Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse) ofreció ayer al Ayuntamiento de Cartagena comprarle dos fincas municipales que lindan en su límite este con el espacio protegido de las salinas de Marchamalo. El objetivo es doble: ocuparse de su restauración ambiental y, con ello, frenar el deterioro que ha sufrido ese entorno natural en los últimos años; y evitar cualquier posibilidad de que en el futuro la zona sea urbanizada.
La organización ecologista acordó en la última reunión de su junta directiva hacer una oferta de compra de los terrenos al Ayuntamiento porque son necesarias «acciones urgentes» para garantizar la conservación de las charcas, que en los últimos meses han comenzado a secarse y donde han muerto peces.
Las denuncias de Anse han obligado a la Consejería de Desarrollo Sostenible a rescindir el convenio de gestión de las salinas con la empresa Salinas La Manga SL, de los conocidos promotores inmobiliarios Mariano Roca y Antonio García (hijo de Alfonso García). El propio titular de esta consejería, Benito Mercader, tiene previsto explicar hoy en la Asamblea Regional esta decisión y anunciar las medidas para preservar las salinas.
No obstante, Anse considera que la Comunidad ha estado a punto de «dejar morir» este humedal de «elevadísimo» valor ambiental y cultural (está protegido como Lugar de Importancia Comunitaria y Zona de Especial Protección para las Ave). Y, por eso, plantea comprarle al Ayuntamiento tres hectáreas (30.000 metros cuadrados) de terreno que limitan con las salinas, también Humedal de Importancia Internacional.
Borrador de cesión
La propuesta de Anse llega después de que el Ayuntamiento no haya concretado las conversaciones que, según los ecologistas, mantuvieron hace tres años para la cesión de los terrenos. La cesión habría permitido realizar un «proyecto de conservación y recuperación de los hábitat característicos de La Manga y Mar Menor, casi desaparecidos en su totalidad a causa del excesivo desarrollo urbanístico», según Anse.
En un comunicado, la asociación indicó que las conversaciones fueron con el ex concejal de Urbanismo y actual vicealcalde, Agustín Guillén, y que fruto de ellas la ex concejal de Hacienda y actual consejera de Sanidad, María Angeles Palacios, redactó en el 2007 un escrito de cesión de uso de los terrenos a Anse que no ha llegado a hacerse efectivo.
Los naturalistas piden que el Ayuntamiento acepte esta oferta de compra «y se inicien conversaciones para establecer el precio de compra, que deberá tener en cuenta la calificación como suelo no urbanizable protegido».
Ya están protegidos
De negarse a la venta, Anse espera que el consistorio «haga firme la cesión de uso con el fin de llevar a cabo trabajos de recuperación ambiental o, en caso contrario, la cesión a la Comunidad Autónoma para que desarrolle las mismas actuaciones con cargo a los presupuestos de la Dirección General del Medio Natural».
«Para que haya comprador primero debe haber vendedor», respondió Agustín Guillén, molesto con que Anse anunciara su disposición a comprar los terrenos a través de la prensa «y no del Registro General del Ayuntamiento».
Guillén dijo que esos terrenos. al igual que muchos otros en todo el municipio ya están protegidos,, «Lo que pasa es que nosotros no le damos tanta propaganda a lo que tenemos en propiedad y protegido», señaló a este diario el vicealcalde.Y aunque dijo desconocer que haya un borrador de cesión del suelo a Anse, abrió la puerta a un acuerdo: «Se puede ceder en función del proyecto que tengan».
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