miércoles, 25 de julio de 2007

PSOE y PP cortejan a Izquierda Unida buscando sin éxito un pacto en La Unión

La coalición rechaza por el momento un acuerdo con ambos partidos y dejará que sean los populares, la lista más votada, los que sigan gobernando
G. HERMIDA / J. A. PÉREZ/MURCIA / LA UNIÓN/LA VERDAD
Cantos de sirena desde ambas orillas. Eso es lo que más suena desde ayer en los oídos del único edil de Izquierda Unida+Los Verdes en el municipio, José Haro, después de que el Tribunal Constitucional aceptara un recurso del PSOE para anular una papeleta y dejara en empate a ocho ediles el equilibrio político del Pleno.

Ayer, mientras los socialistas se felicitaban por la decisión del alto tribunal y anunciaban su intención de «iniciar contactos con IU para conformar un gobierno estable progresista», el alcalde, el popular Francisco Bernabé, ofrecía a Haro la primera tenencia de alcaldía y asumir buena parte de su programa electoral, incluyendo una reducción del número de viviendas previstas en el Plan General de Ordenación Urbana o la creación de un gran pulmón verde en la zona de Lo Tacón-El Chorrillo.

La posible propuesta de los socialistas aún no se conoce, pero de momento, Haro -de vacaciones en el norte de España- ha reiterado que «no pactaremos con ninguno y seguirá gobernando la lista más votada», es decir, el PP.El edil de IU+LV dijo tener el apoyo del coordinador regional de IU, José Antonio Pujante, quien negaba ayer que el PSOE se haya puesto en contacto con él y reiteraba que será la asamblea local del próximo lunes «la que tome la decisión».Desde el PSOE se apelaba ayer a la «responsabilidad» de la coalición y al «respeto a la voluntad mayoritariamente progresista expresada por los votantes de La Unión» para emplazar a Izquierda Unida a un pacto. Los choques de ambos partidos a lo largo de los últimos ocho años hacen muy difícil -«prácticamente imposible», según Pujante- el acuerdo, pero el coordinador de IU aclaró que se trata de un desencuentro programático y político «y nunca personal». Sin embargo, el relevo de José Manuel Sanes al frente del socialismo unionense parece condición sine qua non para siquiera que los rojiverdes acepten hablar en serio de pacto.Desde las filas socialistas, Jara se puso la venda antes de sufrir la herida y afirmó que «la generosidad del PSOE tiene un límite, que se imponga el debate de ideas sobre las vendettas personales» y descartó el relevo. «Tal vez al que hay que cambiar es al cabeza de lista de Izquierda Unida», apostilló Sanes.En Izquierda Unida tienen claro que pactar con el PP «contra natura» no es factible, pero ven casi igual de lejos un acuerdo con el «viejo socialismo» que representan Sanes y su equipo más cercano. Sin embargo, el cortejo no ha hecho más que empezar...

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